Cada vez se habla con mayor frecuencia de las personas tóxicas, sin embargo, existe un número alto de personas que, a pesar de ser víctimas, no identifican a su acosador emocional hasta que esta situación se prolonga en el tiempo.
¿Quiénes son las personas tóxicas?
Las personas tóxicas son tanto aquellos individuos que continuamente dañan emocionalmente a otras, haciéndolas sentir mal como las que absorben la energía de otros con su constante pesimismo e invasión del espacio. En algunos casos existe intencionalidad de hacer daño por parte de la persona tóxica mientras que en otros no. Además, también se les conoce como vampiros emocionales, este nombre se debe al malestar y la pérdida de energía que originan en aquellos a los que persiguen.
De todos es sabido que cada individuo tiene su propia personalidad, forjada a partir de las experiencias, la observación y las relaciones con otros. Cada uno tendrá su manera de pensar, de sentir y de actuar. A lo largo de la vida, unos rasgos de personalidad sobresalen más que otros, e incluso puede que algunos desaparezcan (por los mismos motivos que aparecían: observación, experiencia y relaciones con otros). Sin embargo, pese a la individualidad, las personas tóxicas provocan malestar en otros, de una manera u otra.
Tipos de personas tóxicas
Como se ha comentado anteriormente, la manera de comportarse de las personas tóxicas daña a otros, repercutiendo en la autoestima de las víctimas. Existe una característica común que es la falta de empatía, sin embargo, no todas actúan de la misma manera. ¿Qué tipos existen?
- Personas celosas y envidiosas.Desear ser como otra persona, tener algún rasgo de otro individuo (ya sea físico, psicológico o social) en algunos casos, impulsa a la persona que siente este deseo irrefrenable a damnificar a otro con el fin de conseguir lo que el otro tiene (por ejemplo, un puesto de trabajo).
- Personas negativas y catastrofistas. Define a personas que mantienen una actitud negativa ante las diferentes situaciones que se presentan además de confiar constantemente en que todo va a salir mal. Aunque a priori pueda parecer que esta actitud no tiene por qué afectar a otras personas, y que quieras ayudar a alguien así porque te produzca tristeza verlo siempre mal, lo cierto es que esta actitud consume toda la energía de las personas a las que se rodea, llegando incluso la víctima a sentir cansancio físico tras estar mucho tiempo con personas de este tipo.
- Personas violentas y agresivas. Insultos, amenazas, críticas continuas o humillaciones son algunas de las armas que utilizan este tipo de personas para con otros, hiriéndoles emocionalmente y debilitándoles la autoestima. Encontrarte con este tipo de personas y no darte cuenta hasta que ya han actuado violentamente en tu contra, puede hacer peligrar tu integridad por lo que es importante detectarlo y saber actuar ante ellos.
- Personas con falta de principios. Individuos cuyo objetivo es hundir a otros. Pueden buscar hacer sentir mal a aquellos que se encuentren a su alrededor, sin importar que para ello tengan que faltar a la verdad, ser deshonestos, desleales o imprudentes.
- Personas manipuladoras. En un primer momento querrán seducir a otras personas para ganar la confianza para más tarde, manipular a través de diferentes artimañas. El chantaje irá siendo cada vez mayor y, a veces, es difícil darse cuenta de la manipulación emocional ejercida, debido a la sutileza con la que la practican.
- Personas victimistas. Aquellos que se inclinan al victimismo con quejas continuas pueden llegar a agotar la paciencia de los que las escuchan. Aunque en algún momento podemos escuchar a nuestros amigos y familiares hablarnos de sus problemas, estar sometidos a oírlos continuamente puede generar cierto tipo de rechazo.
- Personas autoritarias. Para algunos, dar órdenes y mandar a otros a hacer cosas es una constante diaria, y no solo en el caso de los jefes. Existen personas con rasgos autoritarios que piensan que los demás deben hacer todo aquello que ellos quieran aunque ello suponga atemorizar a otros. Las personas que sufren tal autoritarismo están sometidas a un nivel alto de alarma, generándoles estrés y ansiedad.
Es importante mencionar que todas las personas en algún momento pueden mostrar, ante alguna situación concreta, determinados rasgos descritos: negativismo, agresividad, victimismo…, pero en el caso de las personas tóxicas, estos rasgos predominan en su día a día.
¿Cómo reconocer a este tipo de personas?
- Sientes malestar continuado ante su presencia, en algunos casos traduciéndose en cansancio.
- Deseas alejarte de ella.
- Tras pasar tiempo con esta persona, tu humor se ve afectado y esto influye en tus relaciones con otras personas.
- A pesar de que tu hayas dedicado tiempo a escucharle/ayudarle, cuando tú necesitas su ayuda o quieres hablarle sobre algo que consideras importante, esta persona no te lo permite, mostrando desinterés por todo aquello que te pase.
- Tu autoestima se ve dañada.
- Menosprecia tus ideas.
- No consigues relajarte ni estar tranquilo si sabes que la persona está cerca de ti.
- Pese a que se trate de una persona con la que pasas mucho tiempo a lo largo del día, como por ejemplo un compañero de trabajo, no recuerdas tener momentos agradables ni de intimidad.
¿Dónde podemos encontrarlas?
Podemos conocer a personas tóxicas en cualquier parte: en el trabajo, en nuestro grupo de amigos, vecinos, familiares e incluso pareja sentimental. Hay ocasiones en las que se crean relaciones tóxicas de las que es difícil desvincularse. Lo importante es reconocer cuando se está inmerso en una de ellas o cuando alguien está mostrando dicha actitud perniciosa y poner límites cuanto antes, para así prevenir las posibles consecuencias emocionales.
Recordemos que la persona tóxica no siempre es consciente del daño que está causando a otros.
¿Qué ocurre si me siento una persona tóxica?
La persona tóxica no siempre es consciente del daño que está causando a otros. Puede pasar que, al darse cuenta, intente cambiar esa conducta por otra actitud más empática, pero también puede ser que no conozca otra manera de relacionarse con las personas.
Los motivos que propician este tipo conducta tóxica son diversos, traumas vividos en experiencias pasadas, falta de relaciones en un entorno de seguridad, conflictos de identidad… e incluso puede que la persona esté utilizando ciertos mecanismos de defensa camuflados en estos comportamientos. No obstante, si se está dispuesto a cambiar, es posible lograr el cambio.
Natalia Correa Flores
Referencias:
Lemos Rodríguez, R. 7 tipos de personalidades tóxicas|la mente es maravillosa. https://lamenteesmaravillosa.com/7-tipos-de-personalidades-toxicas/
Mas, M.D. (2013). Personas tóxicas: perfiles más frecuentes y cómo vencerlas | Siquia – Psicólogos online. https://www.siquia.com/blog/personas-toxicas-perfiles-mas-frecuentes-y-como-vencerlas/
Molina, X. (n.d.). Las 9 señales para identificar a una persona tóxica. Psicologiaymente.net. https://psicologiaymente.net/psicologia/senales-identificar-persona-toxica
Molina, X. (n.d.). Vampiros emocionales: las 7 personalidades tóxicas. Psicologiaymente.net. https://psicologiaymente.com/social/vampiros-emocionales-personalidades